La percepción de la inmigración en nuestro país: visión de veterinario

Esta idea del buen inmigrante fue también destacada por Javier de Lucas, profesor de la Universidad de Valencia. Para de Lucas éste sería un trabajador invitado, que solo viene a trabajar un tiempo y después vuelve a su país. A esta visión es la que el profesor llamó la visión de veterinario, percibiendo al inmigrante como un animal de trabajo. A esto debemos añadir que “en nuestro país las políticas niegan la inmigración como fenómeno que no sea solo de índole social. No se asume la inmigración como tal, lo que en lógica incluiría la libre circulación. Nosotros cometemos el error de clasificar a los inmigrantes en políticos, económicos, desplazados, refugiados, etc.”

El propio concepto de inmigrante está mal concebido, ya que pensamos que éste es en esencia, porque en España “nos indigna llamar inmigrantes a los doctores que estudian en EE.UU las células madre, a los millonarios fichajes de los equipos de fútbol, o incluso a los Reyes de España, porque el Rey nació en Roma y la Reina en Grecia”.

Precisamente uno de los problemas a la hora de integrar a los inmigrantes en nuestro país radica en la gran cantidad de tópicos existentes sobre la inmigración. Estos fueron analizados por Jesús Contreras, profesor de antropología de la Universidad de Barcelona, quien aseguró que los musulmanes son los mas difíciles de integrar, aunque “deberíamos preguntarnos si es la religión islámica la que dificulta la integración, o nuestras propias ideas”. Para Contreras, el Islam se ha tergiversado enormemente, y se ha creado una idea errónea fruto de la ignorancia y de la manipulación social.

Uno de estos tópicos es la idea de que nos están invadiendo, termino erróneo que los medios de comunicación de masas se han encargado de difundir. Para el profesor catalán si observamos las cifras (según datos del INE, en diciembre de 1999 vivían aquí 801.329 extranjeros, el 0,97% del total de la población de nuestro país, frente al 4% de Francia, el 6,6% de Alemania o el 8% de Austria), somos uno de los países europeos con menos porcentaje de inmigrantes.

Otra idea muy extendida es la de que los inmigrantes nos quitan el trabajo, la cual se resuelve de forma sencilla, ya que si ocupan un espacio es porque éste esta libre. “En sectores como la minería, la hostelería, la construcción o la agricultura la mano inmigrante es fundamental. Son trabajos que los españoles no queremos realizar”.

El tópico nuestra identidad está amenazada, es para el profesor Contreras el que menos fundamento tiene, ya que cuando se afirma esto no sabemos definir nuestra propia identidad, nuestras costumbres, sobre todo teniendo en cuenta que nosotros hemos perdido muchas costumbres que formaban parte de nuestra identidad, como por ejemplo las practicas católicas que llegaron a condicionar nuestro calendario.